El Departamento de Alimentación del Servicio Central de Inclusión y Bienestar Universitario (SCIBU) desarrolló una serie de acciones de promoción en salud durante la Semana Mundial de la Sensibilización de la Sal que este año tuvo lugar del 14 al 20 de marzo.
En el marco del diseño e implementación de políticas sobre educación alimentaria nutricional dirigidas a la comunidad Udelar en general, y a la población becaria en particular, el Departamento de Alimentación se sumó a la campaña mundial para la reducción del consumo de sal en la dieta diaria de la población. Para ello, se realizaron acciones específicas de concientización sobre los riesgos en la salud que representa una presencia no controlada del sodio en nuestra alimentación, informando al estudiantado que concurre periódicamente a los Comedores Universitarios y cantinas en convenio con el SCIBU.
Durante dicha semana, no se ponen a disposición los recipientes que contienen sal y solo se aporta hasta un gramo extra, en caso que la población becaria lo solicitara expresamente. En todo caso, se transmite al estudiantado los beneficios que repercuten en la salud el control de su consumo.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda un consumo de sal no mayor a cinco gramos al día, equivalente a una cucharadita diaria.
El equipo técnico del Departamento de Alimentación del SCIBU señala que los alimentos de por sí, presentan sodio (Na) en su composición química, por lo cual no sería necesario el agregado de sal a la alimentación diaria.
Aclara que el agregado de sal a las comidas, además de dañar la salud, opaca tanto los sabores como los olores de los alimentos.

¿Donde está presente la sal?

– Sal de mesa.
La más utilizada entre la población y su consumo forma parte de una conducta cultural y aprendida desde la niñez.
– Alimentos ultraprocesados
Se encuentra oculta en determinados productos como galletas rellenas, panificados, productos de repostería, jamones, quesos, panceta y algunos yogures). También está presente en algunos alimentos congelados como pizzas, empanadas, rellenos de pastas, etc.
Alimentos consumidos fuera del hogar (confiterías, panaderías, restaurantes, etc).

¿Qué hace el Servicio de Alimentación del SCIBU?

El Departamento de Alimentación del SCIBU elaboró una guía con recomendaciones sobre preparación y consumo de alimentos con baja presencia de sal.
En cuanto a las preparaciones de menúes brindados al estudiantado con beca de alimentación, se elaboran preparaciones culturalmente aceptadas y lo más hogareñas posible.
En el caso de que en el menú se incluyan alimentos ultraprocesados (como el jamón y quesos) que en su proceso de producción se utiliza mucha cantidad de sodio para su conservación, se busca como estrategia utilizar masas sin sal o agregar más vegetales y frutas para contrarrestar el contenido de sodio.
El principal objetivo del Servicio de Alimentación de SCIBU es cuidar la salud del estudiantado con beca y de la comunidad Udelar, mediante la permanente educación y concientización del consumo de alimentos sanos, y una alimentación equilibrada, más natural y casera.

Recomendaciones del equipo técnico del Departamento de Alimentación del SCIBU
Para mantener un adecuado estado nutricional evitando el sobrepeso y la obesidad desde edades muy pequeñas es importante:
• La realización de actividad física con una frecuencia de tres veces por semana a un ritmo moderado. Es una manera de evitar el sedentarismo y contribuir a un buen funcionamiento del aparato circulatorio de nuestro organismo.
• Consumir diariamente verduras, tanto crudas como cocinadas, ya que nos brindan diferentes vitaminas y minerales, así como diferentes antioxidantes necesarios para cuidar nuestro cuerpo. Éstas deben de representar la mitad del plato diariamente.
• Optar siempre como postre o colación el consumo de frutas, mínimamente tres unidades al día, principalmente de estación que tienen sus propiedades con su mayor potencial.
• Tanto las frutas como las verduras contienen muy poca cantidad de sodio en su composición y una importante cantidad de fibra dietética que contribuye a nivelar los valores de presión arterial. El consumo de frutas y verduras diariamente es una estrategia importante para disminuir el consumo de sodio de la dieta diaria.
• El consumo de fibra alimentaria es importante no solo para disminuir las cifras de presión arterial, sino que también contribuyen con el buen funcionamiento del aparato digestivo siendo los mismos nutrientes para las bacterias beneficiosas que poseemos en los intestinos.
• Es imprescindible disminuir el consumo de sal de mesa, de esta manera se resaltará mejor los sabores propios de cada alimento.
• Realizar comidas caseras, para mantener las tradiciones familiares y culturales de nuestro país y condimentarlas con especias naturales y no con sal de mesa.
• Leer bien las etiquetas de los alimentos y conocer su contenido en sodio.
• Enjuagar los alimentos enlatados lo máximo posible (como mínimo tres veces bajo el chorro de agua potable) ya que se conservan en agua con sal como son el choclo, arvejas, legumbres, tomates, etc.
• Preferentemente optar por arvejas y choclos congelados, no olvidando realizarle una cocción previa de dos minutos en agua hirviendo para evitar contaminación por algún microorganismo.