El 23 de agosto, Fitness del área de Deportes del SCIBU se convirtió en una fiesta de color y alegría, y también en una oportunidad de viajar en el tiempo, al celebrar la nostalgia con un clase retro.
La propuesta que este año tiene lugar en el Salón de los Espejos de Facultad de Psicología, los días martes y jueves, tuvo una experiencia que invitó a la diversión y a la integración.
El martes 23 de agosto, participaron estudiantes y funcionarias que asisten habitualmente, así como algunas personas que concurrieron por primera vez a las clases atraídas por esta particular propuesta. Las participantes lo hicieron con la predisposición de lucir disfraces e indumentaria de la década de los años 70 y 80.
Ambientación e indumentaria en el Salón de los Espejos
El salón donde se realizan las clases fue acondicionado con el aporte colectivo de la docente y las participantes.
Colgaron carteles coloridos con dibujos de notas musicales, flores y personas luciendo indumentaria de la década de los años setenta.
Recrearon con distintos materiales la imagen icónica de la película de 1978, fiebre de sábado por la noche donde aparece un joven John Travolta en posición de baile al ritmo de la música disco.
Las mismas participantes, junto con la docente, dedicaron un tiempo de preparación, para decorar el salón de los espejos. Varias de las participantes se lookearon en el momento, recurriendo a vinchas, pañuelos, pelucas y hasta amplias capelinas.
Lucían colgantes con la imagen del símbolo de amor y paz del hippismo, e incluso posaban para la foto poniendo los dedos en V, representando la victoria.
Las luces del salón se apagaron y fueron encendidas las esferas giratorias que generaba un clima de baile de música retro en pleno barrio Cordón.
Una de las participantes de las clases de Fitness elaboró su propia cartelería para ambientar el salón. Recurrió a imágenes que representaban discos de vinilo, lentes y pelucas, y agregó la inscripción “I love 80s”.
La docente e instructora de las clases de Fitness, Sharon Kitchen, lució una indumentaria especial, que buscaba recrear el póster denominado “Rosie, la remachadora”, que se convirtió en un símbolo de la fortaleza femenina en Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial, y que luego se convirtió en un ícono del feminismo mundial. Dio la clase vistiendo championes, un enterito y una camisa azul de jean, y en su cabeza lució un pañuelo de color rojo con decoraciones en blanco. También en varias ocasiones, flexionó su bicep para reforzar el concepto de “¡Podemos hacerlo!
Música de diferentes décadas
La clase comenzó con la música de Barbie girl perteneciente al grupo Aqua, que a fines de los años noventa, lanzaba una canción muy bailable pero también con un contenido satírico sobre la cultura patriarcal y machista predominante en esos tiempos.
Uno de los puntos altos de la clase fueron los primeros acordes de Y.M.C.A, una de las canciones más populares de los Village People de la década de los años setenta, que fueron llegando a las nuevas generaciones por aparecer en series televisivas y películas de cine.
También fueron momentos que invitaban al mayor movimiento, con la música brasileña de la década de los años ochenta y noventa y canciones de Thalía.
“Una clase diferente y divertida”
Una de las funcionarias de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación cada día martes y jueves al finalizar su jornada laboral se traslada a Facultad de Psicología para participar de las clases de fitness. Previo a la pandemia, participaba de la actividad cuando se dictaba en el liceo IAVA. Incluso durante los años 2020 y 2021, prosiguió con las clases en la modalidad virtual. “Continuamos entusiasmada con hacer ejercicio y si bien estuvo bien que la propuesta prosiguiera durante la pandemia a través de las redes sociales, es siempre mejor la modalidad presencial. Esperemos que prosiga así”, indicó.
Sobre la clase especial de nostalgia del martes 23 de agosto, acotó que se trata de algo diferente. “Es una distracción y una forma de reforzar los vínculos con el resto de las participantes con edades muy variadas”, acotó.
Una estudiante de la Facultad de Psicología de la generación 2020, empezó recientemente a hacer fitness con la instructora Sharon Kitchen. Tuvo amistades que le recomendaron visitar la página web del SCIBU para buscar actividades gratuitas a fin de realizar en el presente semestre. Y en esa búsqueda se encontró con las clases de fitness.
“Me gusta el baile y la música. Fue precisamente eso lo que me llamó la atención de las propuestas”, indicó.
“Es una motivación para la participación”
Otra estudiante, de la Facultad de Derecho, se integró este año a la actividad. Consideró que la misma es una experiencia muy positiva que brinda la Udelar de formar parte de esta propuesta. “Siempre con la docente Sharon se arman tremendas clases”, expresó. Se enteró por la página web institucional del Servicio Central de Inclusión y Bienestar de las clases de Fitness y decidió participar para “proseguir en movimiento». Antes de iniciar la carrera en la Udelar, en la ciudad de San Ramón, también participaba de propuestas similares.
Catalogó de “muy buena” la idea de hacer una clase de fitness retro porque es una forma de
motivar la participación y que la comunidad universitaria se entere de la misma.
Sandra es estudiante de la Facultad de Psicología, y el 23 de agosto fue la primera vez que participó de la clase de fitness atraída por esta propuesta especial de la moda retro. “Salís un poco de la rutina del estudio y el trabajo. Y además, amo la música de los ochenta y noventa”, enfatizó.
Reconoció que concurrir a esa clase fue su primera experiencia para decidir si continúa asistiendo.