Culminó en Tacuarembó el Taller de Creación de Canciones a cargo de los docentes Mario Paz y Damián González, con un cálido encuentro entre los participantes donde se compartieron algunas de las creaciones artísticas que surgieron en el taller.
La propuesta se hizo posible por primera vez en el departamento gracias a la coordinación del Área de Cultura del Servicio Central de Inclusión y Bienestar Universitario, la Sede Tacuarembó del CENUR Noreste de la Udelar, la Cátedra Washington Benavides, y también gracias al apoyo de AEBU.
El primer encuentro presencial tuvo lugar el pasado 21 de mayo en AEBU, con una concurrencia de personas interesadas en la temática que superó las expectativas de los docentes, debido a que el grupo estaba integrado por varios aficionados a la música y la escritura e incluso, algunos que ya dedicaban su tiempo a estas disciplinas como trabajo o como hobbie.
Los siguientes encuentros se fueron intercalando entre instancias virtuales y presenciales, donde se fue trabajando en descubrir y fortalecer habilidades compositivas en su aspecto musical y literario.
Del intercambio surgieron diversos trabajos de escritura y de análisis de autores que hicieron cada encuentro, una instancia exquisita; donde siempre primó el respeto y la admiración mutua entre compañeros, aspecto que fue destacado por el equipo docente.
Finalmente, el cierre del taller fue realizado en la Cátedra Whashington Benavides y contó con la presencia de Daniela Bouret, Directora del Área de Cultura del Servicio Central de Inclusión y Bienestar Universitario, quien acompañó la jornada y celebró el éxito de esta iniciativa en el departamento.
Además de compartir los últimos trabajos, se disfrutó de una jornada distendida con un almuerzo compartido en el cierre de este taller que sembró la semilla de la creatividad y la confianza necesaria para tomar la iniciativa y descubrir eso que habita en nuestro interior.
El grupo, compuesto por una diversidad de edades y gustos musicales, guardan en común una necesidad de expresar y compartir ideas y emociones que salieron a la luz luego de cada ejercicio propuesto. Al momento, permanece latente un próximo encuentro para continuar descubriendo y potenciando juntos la creatividad. En ese sentido, la finalización del curso no significó una despedida, sino un «hasta luego».